Por Jonathan Planchart
«Caracas, la capital de Venezuela era asediada por bandas de motorizados armados de clara tendencia oficialista»
Y finalmente llegó el tan esperado 7 de Octubre, el día “D”, el fin de los tiempos. Pero ese día fue un día de elecciones común y corriente, salvo la proliferación de las bandas armadas del chavismo desde horas de la tarde, todo transcurrió en total normalidad. Demasiado normal para mi gusto y para el de otros tantos. La gente respondió al llamado del chavismo y la oposición y salió a votar temprano, ya entrada la tarde, se conocían los resultados de los primeros “exit polls” o encuestas a boca de urna, todas daban como ganador a Henrique Capriles Radonski el candidato de la Mesa de la Unidad Democrática, la coalición opositora al chavismo.
Y esa tendencia se mantuvo inalterable más o menos hasta las 6 de la tarde, cuando una rueda de prensa del Comando Carabobo cambió las cosas. Las caras de alegría súbitamente se transformaron en caras de preocupación en las filas opositoras y antes que apareciera en escena la “presidenta” del Consejo Nacional Electoral, Tibisay Lucena, un “tweet” de Nelson Boccaranda Sardi, afamado periodista de oposición, predijo que Hugo Chávez se impondría por más de 1 millón de votos. A todas estas, Caracas, la capital de Venezuela era asediada por bandas de motorizados armados de clara tendencia oficialista, quizá los famosos “Tupamaros”, fomentando el miedo entre la ciudadanía desde horas de la tarde, intimidando a votantes primero y causando zozobra luego.
Pero el momento de la verdad finalmente llegaría a eso de las 10 de la noche, momento particularmente temprano escogido por la señora Lucena para dar a conocer los resultados electorales: Hugo Chávez Frías resultó electo por un poco mas de 8 millones de votos mientras que su contendor Henrique Capriles Radonski perdía por algo más de 1.200.000 votos, sacando aproximadamente 6.500.000. Media Venezuela quedó estupefacta ante este resultado, petrificada ante el televisor mientras que otra presumible mitad celebraba el triunfo, el cuarto, del “Comandante de la Revolución”. A todas estas, la oposición venezolana, tanto su dirigencia como el opositor “de a pie”, sabía que estas elecciones eran vitales, de ganar Hugo Chávez, se consolidaría su revolución socialista y, quizás, se volvería “irreversible”, con todas las consecuencias que ello implicaría para la población venezolana (ineficiencia de gestión administrativa, inseguridad, invasiones, expropiaciones, corrupción, amenazas a la prensa, a la libertad de expresión, a los derechos humanos, etc., lo que todos conocemos, en fin, el lado oscuro de la revolución de Hugo Chávez). Ahora, quedaba esperar si el Comando Venezuela, la MUD y el propio candidato Henrique Capriles Radonski, aceptaban los resultados emitidos por el CNE.
Una de dos, o la MUD y Capriles aceptaban los resultados o los objetaban. Finalmente el momento llegó, Capriles apareció ante las pantallas del televisor aceptando tácitamente los resultados y reconociendo la victoria de Hugo Chávez Frías. La pesadilla bolivariana, para muchos, tenía asegurado, al menos y en principio, 6 años más en el poder, el tercer ciclo de 6 años consecutivos bajo la Constitución de 1.999.
Al día siguiente, Caracas amaneció en calma, hubo festejos chavistas la noche anterior en ciertas zonas de la Capital, pero el lunes, tanto en Caracas como en otras ciudades, no se registraron mayores indicios de celebración, ni caravanas, ni festejos en calles o plazas públicas. ¿Qué pasó?
Ese mismo día, la población opositora no durmió, al igual que no había dormido la noche anterior por la incertidumbre, esta vez no durmió de la desolación. En ese momento quien escribe pensó en los comisarios, en la jueza Afiuni y demás exiliados y presos políticos. También pensé en las expropiaciones, en los insultos, en el estilo bravucón de gobernar, en Aponte Aponte, en las comunas, en las invasiones, en los pobres de este país que hoy dependen de una o dos misiones para sobrevivir, en la ideologización de la educación, en las milicias, en las bandas armadas, en el hamponato de cuello blanco y cuello rojo, en el estado de las cárceles y de los hospitales, en los siniestros en la industria petrolera, en cadivi, en la lista Tascón o Maisanta, en Franklin Brito, en las listas, en la petrochequera, en la venta de oro, en la construcción de viviendas sin control ni planificación como chupeta electoral, en los cubanos, en los chinos, en fin, en todo lo que significa el gobierno de Hugo Chávez.
Fraude, pensaron algunos. Capriles había desarrollado una intensa y emotiva campaña que realmente pusieron a soñar a una buena parte de los venezolanos. Sin embargo, tanto el candidato perdedor como la MUD y el Comando Venezuela fueron los primeros en aclarar que no hubo fraude. ¿Qué pasó?¿Por qué la precipitación en admitir la derrota? ¿Qué tal si esa noche se hubiera plantado la MUD, el Comando Venezuela y el candidato opositor y hubiesen exigido al CNE un reconteo manual de votos? No era algo ilegal. Capriles siempre dijo en campaña que respetaría la voluntad del pueblo, y la voluntad del pueblo estaba expresada en las papeletas. ¿Se confió ciegamente en un automatizado sistema electoral que no permitió ni siquiera la presencia de Observadores Internacionales? Algo no camina, pensaron otros. Tanto nadar para morir en la orilla.
Yo no creo que hubiese significado una irresponsabilidad exigir el conteo manual de votos, al contrario, me parece que esa hubiese sido la opción correcta a tomar. Capriles al final se convirtió en Manuel Rosales. Y no porque no se le puede quitar que “dejó el alma” en la campaña, todos sabemos que así fue y se lo reconocemos, pero, a la MUD le faltó calzar las “bragas prietas” de Rómulo Betancourt, como dice el periodista Rafael Poleo. Ese era el momento y no otro.
Quienes sostienen la tesis del fraude dicen que el Registro Electoral Permanente (REP) se ha venido inflando de una manera desproporcionada en los últimos años, y sacan cuentas y llegan a la conclusión que mientras no se audite ese REP no hay manera de llegar con ciertas garantías mínimas a una elección. Aducen que no puede ser que el porcentaje de la población electoral sea igual a la población mayor de 18 años, porque siempre hay una porción de la población que no se inscribe, de modo que así como nunca vota el 100 % de los votantes (siempre hay un margen de abstención que puede rondar el 20, 30 y hasta 40 % o más) es imposible que se inscriban en el REP todos los nuevos votantes y los llamados a votar. Establecen que esa proporción sería de alrededor de un 30 % de la población votante y que bajo ningún concepto ambas cifras deben coincidir, por lo que si el REP arroja hoy un total de aproximadamente 19 millones de personas en edad para votar, la cifra de votantes inscritos debería estar por el orden de los 14 millones de personas. Si esto es así, entonces el REP tiene más o menos una votación virtual o ficticia de 5 millones de personas inexistentes.
Ahora bien, en la práctica, ¿Cómo se ejecutaría ese fraude si las actas de votación son las mismas para cada candidato y para el CNE? ¿Cómo votarían esos electores ficticios o virtuales? ¿Se activarían solos? ¿Con doble o triple cedulados? ¿Con un CNE paralelo? Habría que ser experto en estadística o ciencias actuariales, pero confieso que ignoro cuál podría ser el procedimiento.
Sin embargo, la verdad es que el CNE se hizo el loco ante el ventajismo oficial, las cadenas, el uso de recursos públicos para hacer proselitismo político y pare usted de contar. La tesis del fraude está ahí, mucha gente la considera, muchos la sostienen pero deben explicarla los que la sostienen. Decir solamente que el REP está inflado por sí solo no explica el fraude. Para que esta tesis tenga sostenibilidad debe explicarse con lujo de detalles en qué consistiría el famoso fraude y por qué la oposición calló ante esta supuesta realidad.
Por lo pronto, mucha gente se ha vuelto desconfiada y pesimista, y quizá éste constituya el verdadero desafío de la MUD para los comicios venideros de diciembre próximo y abril del año que viene. Devolverle la confianza a la ciudanía es fundamental, so pena de correr el riesgo de perder los espacios que se han ganado, esto es, alcaldías y gobernaciones. Pero para nadie es un secreto que el verdadero objetivo era la presidencia de la República, objetivo que no se cumplió y se perdió. Aún así, elogio el esfuerzo de la MUD, el Comando Venezuela y el candidato Henrique Capriles Radonski, y si alguien está en capacidad de explicar la tesis del fraude que lo haga de una vez, hasta que esto no suceda, no daré crédito a tales tesis. Ahora bien, lo lógico es que se abra el REP, se depure y se vuelva al sistema manual, a fin de quitar las dudas que se ciernen sobre el sistema automatizado. Nunca está de más oír la voz de los que disienten de la opinión mayoritariamente aceptada.
LO UNICO ME QUEDA DECIR CHAVEZ, PARA SIEMPRE AUÑNQUE LES DUELA A LOS ADVERSARIOS.
AL COMANDANTE CHAVEZ. GRACIAS, MIL GRACIAS POR VER LANZADO AL COMANDANTE VIELMA MORA PARA LA CANDIDATURA PARA EL TACHIRA, CON EL GANAMOS SIN EL PERDEMOS, GRACIAS COMANDANTE POR DARNOS ESTE REGALO SEGURO ESTAMOS NO VAMOS A PERDER, CON VIELMA MORA GANAMOS SOBRADOS, DESDE YA LO QUEREMOS, ESE ES EL HOMBRE CON EL QU7E VAMOS A SACAR A ESTE MAJUNCHE. GRACIAS CHAVEZ, POR FIN NOS ESCUCHO.. CON VIELMA GANAMOS, DELO POR HECHO. ELIZA 04163759438
No sé cómo llegué ante esta crónica de llanto y frustración. Qué aburrida y depresiva debe ser la vida de un disociado psicótico. Menos mal que tienen Prozac, supositorios de Valeriana y bastantes Securezza, porque NO VOLVERÁN.
Como yo, que tengo ahora mismo una copa en la mano, y estoy flipando en celroos…en celroos ambarinos, se entiende.Tengo que darle tiempo pero los aromas a fruta macerada, escarchada; notas de botrytis que no notaba desde Vinoble..no se9, es la primera vez que me topo con un vino ased.
Sr. Jonathan Planchart, usted habla de fraude y de lo «abultado» del REP, para la elección del Presidente de la República. Por que no hizo ese mismo tipo de comentarios cuando la oposición ha ganado en Gobernaciones y Alcaldías? Para ustedes el CNE comete fraude cuando la oposición no gana. Hay que ser consistentes en los argumentos por que si no, pierden credibilidad. No lei en ninguna parte un comentario suyo sobre las «elecciones primarias de la MUD»,donde no había representantes de todos los sectores involucrados y en la cual inmediatamente quemaron las actas para que nadie pudiese verificar los resultados, es eso lo que usted quiere que se haga permanentemente? Todos los invitados internacionales, el Centro Carter, la prensa internacional coinciden en que el sistema electoral venezolano es el mas confiable del planeta.
Ostras sorpresa!!! cunado he recibido el mensaje de David esta maf1ana, y es que a veces uno tiene como intuiciones…y hace unos dedas me pasaba por aqued a ver cosas, y lo de la vendimia ha estado muy bien. Creo que este1is trabajando muy bien, y eso a la larga se nota. Gracias por mantenernos, a med tambie9n, al deda de todo.Este comentario me ha tocado un poco el corazf3n, en situaciones ased es cunado uno le coge me1s ganas al asunto, digamos que, afan me1s, me habe9is cargado las pilas.Y bueno, quize1s debiera explicar este vino, compuesto a un 50% de merlot y cabernet, donde se juntan esos dos redos, el de la ‘dulzura’ del merlot con la ‘fuerza’ del cabernet. Es un vino que no ha sido disef1ado, ha salido sf3lo, como todos, como cuento a veces, de un error en la eleccif3n de depf3sito pasf3 el coupage, y de una tardeda puesta en barrica, vino su final de fermentacif3n donde se ha unido a la ya ‘legif3n de la regaliz’ de los vinos que salen de la bodega.De todas formas era un resultado interesante, la expresif3n estaba ahed, clara y die1fana. Creo que valif3 la pena embotellarlo y disfrutar de esta composicif3n. A afinar y mejorar los peros, pero ya sere1 en otros vinos, este es como es.Salut.