Por Jonathan Planchart Lehrmann
Interpretación libre de los motivos que pudo tener el Vicepresidente al renunciar a su cargo en este momento particular de la historia venezolana.
¿A qué se debió realmente la renuncia del VicePresidente Ramón Carrizales?
Este hecho que sin duda habrá tenido un impacto notable en el gobierno, sucedió a pocos días de empezar un año 2.010 realmente atípico por la serie de acontecimientos que con inusitada rapidez golpearon a los venezolanos de todas clases, tendencias y sin distingos políticos: devaluación drástica de la moneda, cierre frustrado de centros comerciales, cortes o apagones eléctricos controlados o no, expropiaciones a cadenas de hipermercados, cierre de canales, etc.; súmele a lo anterior los ya usuales problemas de inseguridad, desempleo, inflación, corrupción, basura y sin duda a cualquiera deberá llamarle la atención semejante crisis.
El grado de deterioro institucional, social, económico y político del país es evidente. En cualquier nación del mundo una situación así hubiese derivado en una insurrección popular, y Venezuela no podía ser la excepción, acá también ha habido una, la de los estudiantes, quienes con sus manos blancas y su puño en alto alzaron la voz de protesta alertando al resto de la ciudadanía la inviabilidad de seguir como vamos. A todas estas, y siendo un año electoral, la renuncia del Vice y Ministro de la Defensa por razones “estrictamente personales”, no deja de llamar la atención.
¿Por qué un súper ministro cómo él, que supone uno cree firmemente en el proceso y en las ideas del Presidente, funcionario por demás bastante educado y mesurado en comparación con otras fichas del chavismo, de lenguaje cortés y moderado al hablar, renuncia en este preciso momento, y junto a él, su compañera sentimental y Ministra del Ambiente para más señas? Por supuesto que habrá tenido razones, razones muy personales como leyó el comunicado la Ministra de Comunicación e Información, Blanca Eckhout, razones que sólo él conoce, pero que deja muchas interpretaciones, más aún el no haber asistido a las celebraciones del 4-F. ¿Diferencias con el régimen? ¿Desacuerdos en unas cuantas políticas del Presidente? ¿Quizá la excesiva intromisión de cubanos? O será que está abandonando el barco antes que se termine de hundir… Porque el barco se hunde, la crisis es insostenible, el país ciertamente está al borde del colapso y si seguimos con los rojos al timón del barco lo más seguro es que no saldremos del colapso al cual nos quieren acostumbrar.
La lectura de la renuncia del Vice para mí es clara: Es un mensaje a García, es querer decir, hasta aquí llego yo, esta gente está cometiendo demasiados disparates juntos, o también: El barco se hunde, pero yo lo abandono a tiempo. Dicen que si el barco se hunde, el capitán es el último en abandonar la nave, y a veces termina hundiéndose junto con éste, como le sucedió a Adolfo Hitler en el naufragio del nazismo. La historia dará su veredicto.